miércoles, octubre 8

Una alumna... ¿más?


Me levanto seis y media,
cuando mi mamá prende la luz,
y luego de cambiarme,
miro la tele tirada en el "puf"

Entro al salón
con la luz apagada,
dejando la mochila
bajo la mesa oxidada.

Cuando por fin mi amiga llega,
nos ponemos a charlar,
esperando que toque el timbre,
 para poder bajar.

Cuando empieza la clase,
presto atención,
hasta que me invade,
la inevitable distracción.

Como siempre ocurre, 
me distraigo muy fácil,
y garabateo la hoja 
de mi carpeta con lápiz.

Tratamos de no reírnos
con los chistes de mis compañeros,
pero cuando uno comienza,
termina riendo el salón entero.

Luego de las nueve,
el día se pasa volando,
y cuando vuelvo de comer,
con mis amigas me quedo charlando

Odio que mi mesa 
esté desordenada,
y guardo mis lápices 
esperando sentada.

Ya casi es la hora,
en unos minutos salimos,
haciendo que me despida,
de mis mejores amigos.

Llego al otro colegio,
para buscar a mi hermano,
así volvemos a nuestra casa,
tomados de la mano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario